jueves, 22 de enero de 2009

Conocimientos preliminares

Una soldadura ideal es aquella donde el acercamiento interatómico de las partes a unir sea el mínimo posible para garantizar adherencia y afinidad; es aquella donde el aporte de calor sea tan pequeño, que no haya posibilidades a deformaciones o micro-estructuras aledañas indeseables; es aquella donde la calidad del metal soldado sea tal que no se presenten incrustaciones o poros que impidan la uniformidad del metal de soldadura. Es también aquella donde la continuidad de las partes a unir sea tal, que al hacer una macrografía no se distinga la una de la otra.
Es utopía, pero no imposible. En la actualidad ya se manejan procesos donde la ZAT es si acaso perceptible, y la ayuda de las cámaras inertes ayuda en gran parte a minimizar cualquier forma de contaminación, sin olvidar que ya se pueden hacer vacio antes de realizar una soldadura.
Nuestra tarea como interesados en que nuestro trabajo quede excelente está en buscar y adquirir la Técnica y el Procedimiento más adecuado para realizar una buena soldadura.
Dentro de los factores o condiciones a tener en cuenta, la más relevante es la fuente de energía que nos genere una entrada de calor suficiente para lograr la fusión de las piezas a unir, o al menos el calentamiento adecuado previo a la unión, ya sea por capilaridad (mojado) o por la aplicación de presión.
Es necesario antes de proceder con la unión, que las superficies a unir no tengan elementos nocivos (impurezas) que contrarresten la adherencia o calidad de la unión.
Otras condiciones serían:Preparar suficientemente bien la junta, Protección ante los agentes contaminantes, y evitar la distorsión o problemas metalúrgicos que vayan en contravía de nuestro objetivo.